By Alba Cobos
Durante la pandemia de COVID-19, tanto la salud física como la mental peligra.
Los estudios muestran un incremento en trastornos mentales como la ansiedad y la depresión. El estrés está extendido por todo el mundo. Muchas personas sienten estrés debido al impacto inmediato del virus en la salud o como consecuencia del aislamiento social.
En la nueva normalidad, en la que los ciudadanos debemos de adaptarnos a la nueva realidad de coexistencia con el virus, las técnicas de control del estrés y el soporte psicológico serán una importante herramienta para mantener un estado de salud óptimo.
La ansiedad se caracteriza por un desagradable sentimiento de preocupación y temor. Se trata de la reacción del cuerpo y de la menta a un estímulo percibido como estresante, peligroso o incluso, situaciones desconocidas. Un cierto nivel de ansiedad nos ayuda a estar alerta pero para aquellos que sufren del trastorno de ansiedad, se percibe como un estado anormal y muy debilitante.
Hay diferentes trastornos de ansiedad, todos ellos tienen la misma sintomatología y el miedo que cursa de manera irracional y excesiva. Unos cuantos ejemplos de trastornos de ansiedad son: los ataques de pánico, Fobia social, Trastorno obsesivo compulsivo, trastorno de ansiedad generalizado, etc.
Los tratamientos a dichos trastornos pueden ser farmacológicos, psicoterapéuticos y a través de tratamientos basados en mindfulness, como por ejemplo, la meditación y el yoga. Los tratamientos farmacológicos, no son tan efectivos con todos los pacientes y además se ha observado diversos adversos efectos secundarios.
Hay mucha investigación en el campo de la medicina y la psicología para entender los efectos del yoga en la salud de sus practicantes.
Si se contempla que el objetivo principal de la meditación (y el yoga es la práctica preparatoria a la meditación) es la autorregulación de pensamientos, y se comprende que la ansiedad se caracteriza por el pensamiento de tipo disfuncional (preocupación, pensamientos del tipo “y si…”), si se logra el objetivo de dicha práctica, como consecuencia se observa la reducción de los pensamientos disruptivos y en relación, la reducción en la severidad del trastorno.
A través de diversas prácticas del yoga, es decir, asanas (posturas), relajación, pranayama (técnicas de respiración), y meditación se obtiene una mejora global del funcionamiento del individuo. Practicando yoga, se pueden observar cambios como: mejora a nivel físico y mental, regulación emocional, técnicas de control del estrés, mejora en la concentración y atención, aprendizaje de cómo vivir el “ahora”, incremento en la resiliencia y metacognición.
Propongo algunas prácticas del yoga para reducir el nivel de estrés. En posturas por ejemplo, las inversiones son muy recomendables ya que relajan el sistema nervioso y aumentan la circulación sanguínea. Algunos ejemplos de inversiones son: Padangusthasana, Viparita Karani y Salamba Sarvangasana. Ustrasana es otra postura ideal ya que estimula el sistema nerviosos y expande la zona del pecho y hombros, mejora la circulación sanguínea y ayuda a centrar la mente en el cuerpo. La secuencia de Marjaryasana y Bitilasana alivia los síntomas del cansancio y acompasa el movimiento con la respiración, calmando y ralentizando la mente. Por último, Baddha Konasana, es ideal para estirar los músculos y como postura para meditación. También, las técnicas de Pranayama (control de respiración) ayudan a regular la respiración a través de la activación del sistema nervioso parasimpático. Algunas de estas prácticas son: Anulom Vilom y Respiración Completa Yóguica.
Voy a mostrar dos estudios en los que se obtuvieron resultados significativos sobre yoga y sus beneficios.
En la investigación llamada “Perfil de estados de ánimo e índices biométricos relacionados con el estrés en practicantes de yoga” por Yoshihara K, Hiramoto T, Sudo N, and Kubo C, se encontró que las personas que practican yoga desde hace tiempo,, presentan menos niveles de tensión, ansiedad, fatiga y hostilidad.
En otra investigación, llamada “Yoga reduce la ansiedad de actuación en músicos adolescentes”por Khalsa SBS, Butzer B, Shorter SM. Reinhardt K, Cope S para la revista de Terapias alternativas en Salud, se obtuvo que este tipo de ansiedad redujo significativamente al final del programa de yoga.
Si una de las características más relevantes de la ansiedad es el pensamiento disfuncional, tal vez analizando la definición de yoga que escribió el sabio Patanjali, entendamos la relación y necesidad de yoga en el tratamiento de la ansiedad. La definición dice así: “Yoga Chitta Vritti Nirodha”, que se traduce por: completa cesación de los pensamientos.